miércoles, 20 de febrero de 2008

Genealogía del amoral...el Zarathustra dantesco de la calle Fragata...y al final...Un Aleph tirado en la alcantarilla

Él salió de viaje muy chico, a la edad de 18.
Siempre se supo su destino: corresponsal impune en el averno.
Comenzó su viaje en la estrechísima e infinita descendente escalera caracol,
Largas y calurosas jornadas de un viaje que no avisoraba un final fueron los primeros tragos del impune.
A la edad de 23 se cruzó con las primeras amenazas de las que tanto había oído,
Pero aparecieron en formas muy curiosas,
Amistades insoportables, exitosos mediocres, oradores que no redondean, un mundo muy normal, imposible de comprender para él.
Estos enemigos tenían la particular y maligna virtud de la perseverancia, y lograron ser cada vez mas parte de sus días.
Nuestro corresponsal acaba de retornar de su misión, con el cuaderno vacío, arrugado, preso de mil tics nerviosos, derrotado por la calvicie, con la espalda curva, justo para su 29 aniversario.



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Nutrición de vulgaridad desde los recintos mas comunes de ésta:
Devora la TV desde las 21 hs, diarios deportivos empastan su paladar, largos ratos con la oreja parada en el café de la esquina, profundo viaje con un taxista porteño …
Se enriquece la fuente del precoz senil, ríe al mediodía siguiente comentando los lugares más comunes de los lugares comunes.
Joven él aún, avanza en su balbuceo ininteligible mezclado en babas de idiotez.
Pero garantiza el goce, pasa el rato bien. Logra nadar entre bobos, bien acompañado.

Y no se dá cuenta, pero así la vida pasa.

………

Segundos antes del último segundo, el Creador le juega la broma peor,
Le muestra en un instante eterno, el real sentido de la existencia, los años perdidos en la nube del sopor.
Y él sufre, en ese solo momento, todo el dolor del universo.

por el Impune corresponsal enviado a la República de Paternal.

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